Los propietarios de viviendas turísticas intentan reducir el consumo de energía de forma sostenible
Según el último estudio del portal de alquileres vacacionales Holidu, el 88% de los propietarios cuentan con Iluminación de bajo consumo energético y casi el 40% le gustaría instalar paneles solares fotovoltaicos.
A casi tres años de la pandemia y tras un verano de cifras positivas, los propietarios de viviendas vacacionales se enfrentan ahora al dilema de subir o mantener sus precios debido a la crisis energética mundial. Aunque solo en los últimos años se ha convertido en una tendencia en España, ya son varios los propietarios que con una perspectiva a largo plazo han comenzado a reformar sus propiedades de forma sostenible para mitigar los altos costes y seguir siendo competitivos en el mercado del alquiler turístico.
Según el último estudio del portal de alquileres vacacionales Holidu, el 71% de los propietarios españoles tiene en cuenta los aspectos sostenibles a la hora de alquilar su propiedad y el 88% ya cuenta con Iluminación de bajo consumo energético. Esta última, una cifra importante si se consideran los datos publicados por el OMIE (operador de mercado eléctrico designado para la gestión del mercado diario e intradiario de electricidad en la Península Ibérica), en donde los primeros días de diciembre el precio promedio de electricidad alcanzó los 209,3 euros/MWh.
«Los elevados costes energéticos que se prevén para este invierno suponen un gran reto para la economía local, especialmente para los propietarios de pisos turísticos que dependen de este negocio. La implementación de medidas sostenibles es una opción conveniente si el propietario quiere minimizar el aumento o mantener los precios de su alquiler vacacional», afirma Paula Martinez, Directora de ventas Iberia Bookiply, principal plataforma de servicio y gestión de alquiler vacacional para los propietarios de viviendas vacacionales de España.
Eficiencia energética marca la tendencia entre anfitriones
Entre las opciones para reducir los costes energéticos, la implementación de paneles solares fotovoltaicos es una de las más populares en España. En este sentido, los datos arrojan que casi el 40% querría instalarlos en sus viviendas turísticas para amortiguar la subida de precios, aprovechando que es una fuente de energía ilimitada.
Pep, propietario de una casa vacacional en la sierra de Tramontana (Islas Baleares) tiene una casa que es 95% autosuficiente. «Tenemos un sistema fotovoltaico autónomo que suministra electricidad a la casa, por lo que la inflación no nos afecta tanto como si dependiéramos al 100% de la subida de los precios de la electricidad», señala.
Además, «los huéspedes están encantados y les hace más conscientes de que es posible vivir con energías renovables. La próxima modificación será la adquisición de paneles solares térmicos para el uso del agua caliente», agrega Pep, propietario del alquiler vacacional.
En la misma línea, hay propietarios que prefieren invertir en sistemas de consumo eficiente cuando se trata de calentar la casa en invierno. Actualmente, hay muchas opciones en el mercado; sin embargo, lo más importante es tener en cuenta la eficiencia energética para un buen aprovechamiento de los recursos. Este es el caso de Armando, quien alquila una finca vacacional en Santa Brígida (Gran Canaria) y ha reemplazado sus viejos radiadores eléctricos por dispositivos de aire acondicionado con bomba de calor.
«Decidí reemplazar los radiadores tradicionales por dispositivos de aire acondicionado de alta eficiencia energética (A+++). Antes gastaba un montón en la factura de la luz, en cambio, ahora puedo seguir alquilando mi vivienda de alquiler sin preocuparme de la calefacción», explica.
Armando considera fundamental alquilar una propiedad con bajo impacto ambiental, ya que la mayoría de sus reservas provienen de turistas nacionales e internacionales que disfrutan del turismo de montaña cerca de la naturaleza. La emisión de CO2 de sus dispositivos nuevos es considerablemente inferior a sistemas de calefacción convencionales como las calderas de gas.
Consejos para ahorrar energía durante las vacaciones
Unas vacaciones respetuosas con el medio ambiente también son responsabilidad de los huéspedes. Por ello, son varios los anfitriones que han optado por incluir en sus casas guías digitales o instrucciones en formato QR para que sus visitantes estén informados de la situación actual y de las consideraciones a tomar en cuanto a la energía.
- Conocer cuándo y a qué temperatura poner la calefacción: Si ya se comienza a sentir el frío, se recomienda calentar la casa solamente durante el día y evitar hacerlo por la noche. Adaptar la temperatura a los grados necesarios en función de los espacios de la casa es clave para el ahorro energético (Dormitorio: 16 grados, salón: 18 grados y baño: 21 grados)
- Aprovechar las ventajas del lavavajillas: Para ahorrar no solo electricidad, sino también agua, se recomienda utilizar el lavavajillas en lugar de lavar a mano, siempre y cuando la máquina esté completamente llena al encenderla. Los lavavajillas de última generación están preparados con sistemas de ahorro de agua y energía (sistema Eco) que es óptimo en estos casos.
- Sistemas de ahorro de agua: En el caso del propietario, invertir en grifos, inodoros y duchas con sistemas de ahorro de agua es también una forma sostenible de reducir los costes energéticos en un alquiler vacacional. La idea es reducir el caudal de agua en función de la presión de la casa. Cambiar el grifo o la ducha puede costar desde 10 euros cada uno y hay muchas opciones.
- Utilizar la ducha en lugar de la bañera: Si bien los huéspedes buscan disfrutar al máximo de sus vacaciones. En los tiempos actuales es oportuno reducir el uso de la bañera y preferir la ducha durante la estancia. Una ducha de 5 minutos emplea aproximadamente entre 70 a 100 litros de agua, mientras que en una bañera se pueden gastar sobre los 150 litros de agua.
- Controlar las luces, no dejar ninguna encendida por la noche: Hoy en día en muchos alojamientos ofrecen controles inteligentes que se pueden manejar desde un teléfono móvil o una tableta. La ventaja de este tipo de sistemas es que permite centralizar la gestión de la electricidad y se puede controlar de forma independiente desde la casa o mientras se está fuera de ella.